1 mar 2011

Bodys Isek Kingelez


Bodys ISEK Kingelez nació en Congo en 1948, vive y trabaja en Kinshasa.
La carrera de Kingelez comenzó en los años 60 en la elaboración de nuevas técnicas para la restauración de las máscaras tradicionales en el Museo Nacional de Kinshasa. 
Despúes de perder su trabajo como restaurador, en el comienzo de los años 70, el artista pasó meses en hacer meticulosamente modelos arquitectónicos que calificó con el nombre de "maquetas extremas", ya que eran muy extrañas y altas.
Durante estos años Kinshasa se había convertido en un exceso, una ciudad caótica, anárquica, que se caía a pedazos. Kingelez, muy conciente de esto, se dedicó a su estética, su politica y poéticamente a cuestionar la condición humana, y despues del 1977 comenzó a experimentar con el montaje de estructuras excepcionales que ofrecen una visión redentora de la ciudad. En las manos de Kingelez la metrópolis de África se convierte en una utopía urbana.
Hechas de plasico, decorado de cartón, papel y otros materiales, sus modelos de arquitectura no son imitaciones de los europeos o africanos, sino la combinación única y rica de formas europeas, estilos africanos y matices, la ornamentación clásica europea y las formas futuristas. El artista trabaja siempre con cuidado a la escala y el equilibrio de las proporciones de sus edificios compuestos.
Después de 1992 comenzó a imaginar ciudades enteras. Estas obras se componen de edificios, algunos jugetones, algunos completamente excepcionales que se incorporan en una trama urbana cuidadosamente concebida. Avenidas, parques, vías fluviales, estadios, monumentos también forman parte de la visión minuciósa de Kingelez. En conjunto estos elementos cumplen todas las funciones de una ciudad ideal que al artista le gustaría ver construida.
Su primera ciudad se llamó Kimbembele Ihunga, en honor a su pueblo natal. Acerca de las obras Fantome-Ville (1995), Kinshasa: Proyecto para el Tercer Milenio (1997), la Ciudad del Futuro (2000), él mismo dijo:
"Yo quiería que mi arte esté al servicio de la comunidad para crear un nuevo mundo, porque los placeres de nuestra tierra dependen de las personas que viven en ella. He creado estas ciudades para que hubiera una paz duradera, la justicia y la libertad universal. Ellas funcionan como pequeños estados seculares con su estructura política propia, y no necesitarán la policía o un ejército".

Durante mucho tiempo el artista no tuvo la oportunidad de exibir o vender sus obras, pero él siguió y ha realizado mas de 300 de ellas como parte de un mundo colorido, optimista y ilusorio. Todas ellas están firmadas, numeradas, fechadas y etiquetadas con nombres como "Estrella Roja", "Barcelona Post-Office", "Pacific Art", "Oriente", "Bel Atlas", "Francia" y así sucesivamente, que se refieren muchos de ellos a determinadas regiones.
Al igual que muchos otros artistas en su tierra natal, Kingelez anhela ser libre de las limitaciones estilísticas de un gobierno que, según él, se guía en gran medida también por las imágenes de África en los ojos del resto del mundo. 
En su manifiesto "El arte de la maqueta - un arte erudito" - Kingelez pone su enfoque en pocas palabras:
"Yo hago este trabajo más profundamente imaginario y meticuloso con el objetivo de tener más influencia en la vida. Como un artista negro debe dar un buen ejemplo al recibir la luz que el arte puro, este instrumento vital humano, enciende por el bien de todos. Gracias a mi profunda esperanza por un mañana feliz, me esfuerzo por mejorar mi calidad, y el mejor se convierte en el maravilloso. Me muestran un modo de expresión que me viene como anillo al dedo, y me recuerda que yo soy otro artista".














La Ville de Séte en 3009, 2000
Técnica mixta
210x300x89












Kimbembele Ihunga (Kimbeville), 1994.                                                    Papel, carton y otros materiales
130 x 183 x 300 cm










Kinshasa: Proyecto para el Tercer Milenio (1997)                                       tecnica mixta con madera, papel y cartulinas
100 x 332 cm